10 consideraciones breves sobre la huelga:
1) La huelga es un derecho, no una obligación.
2) El punto 1) implica que hay que respetar ambas opciones.
3) El punto 2) debería significar que no hubieran amenazas por parte de jefes (antihuelga) ni de sindicalistas (prohuelga).
4) Para que no hayan suspicacias: yo estoy haciendo huelga y sí, acudiré a las manifestaciones.
5) La figura del piquete es controvertida. Habrá de todo, pero desde luego, abunda en estas huelgas el piquete violento y gilipollas.
6) La figura del policía en una huelga es controvertida también. Habrá de todo, pero desde luego abunda en estas huelgas el policía violento y gilipollas.
7) Tengo buenos amigos (que me consta siguen este blog) en ambos lados. Un saludo a Paco y a Juanjo de paso: se os ve poco el pelo. Lo digo para que se aprecie, como en el punto 4, que mis circunstancias me implican en este post.
8) La figura del piquete violento y gilipollas me evoca a la del policía violento y gilipollas: o se hace lo que él dice o agárrate los machos, que vienen fuertes.
9) El policía hace cumplir la ley y el piquete unos acuerdos legales previos a la huelga. El que es violento y gilipollas se excede con la excusa. A la mierda con ellos. Lo digo porque he puesto hoy la tele y he visto policías abriendo crismas de bicifestantes (¿se dirá así?) y a piquetes pegar collejas a gente por estar tomándose una caña. Los policías y los piquetes deberían estar en el mismo sitio haciendo lo mismo: velar por los servicios mínimos (los polis para que no hayan menos y los piquetes para que no hayan mas). Insisto: a la mierda con ellos, con vosotros si me estáis leyendo.
10) Ni quiero trabajar hasta los 67, ni quiero que el despido sea fácil (y soy EMPRESARIO, ojo), ni quiero que exista precariedad laboral porque es negativo a largo plazo para la economía estatal, ni quiero que un gobierno que va de izquierdoso tome medidas derechosas, ni quiero que una oposición derechona tendente a lo rancio-cincuentón que va de remedio contra la crisis tenga la sensación de que el curso natural de las cosas les va a poner en el poder y todos les vamos a lamer el falo de arriba a abajo con un ritmo hipnótico. Por eso salgo a la calle, no porque me lo diga nadie. Tengo criterio propio: prueben ustedes a tenerlo y a sacar sus propias conclusiones, es altamente reconfortante.
Postdata llena de ira
Los sindicatos han alzado la voz cuando se ha tocado a funcionarios y liberados sindicales. A mi generación lleva tiempo dando por el orto el sistema con el beneplácito de esa generación de gilipollas sabelotodo (extinción obligatoria del ser humano a partir de los 40 si no supera un examen de empatía). Mi generación está saliendo al extranjero con licenciaturas, masters y preparación excelente a trabajar de camareros. Algunos como yo, con plaza concedida como docente en el extranjero, hemos tenido que tragar mierda ante las excelentes tretas de esa pandilla de corruptos y vagos llamada Unión Europea, que con sus recortes nos han dejado sin plaza de profesor en el extranjero mientras ellos comen, beben, se van de putas caras y consumen cocaína (de excelente calidad, me consta) con nuestros impuestos. Nuestra generación, en definitiva, lleva protestando años sin ningún eco por parte de voceros ni autoridades. El trabajador medio, idem. Y ahora se toca a una casta intocable como es la del funcionario o la del liberado sindical y todos a la calle. No es que apoye esta huelga, es que sencillamente me tiro a la calle a cagarme en todo, porque tengo razones para ello.
Conclusión muy simple:
Los sindicatos están ahora mismo desactualizados y son la misma puñetera casta que los partidos políticos o que la iglesia católica. Es decir, unos vividores que se deberían de financiar con los ingresos de sus fieles. Ellos y los bancos son el cáncer de esta sociedad. El día en el que velar por los intereses laborales, democráticos, espirituales y económicos del ciudadano sea vocacional y no profesional (con toda la connotación negativa que encierra la palabra) me creeré cualquier milonga. Hasta que llegue el momento, piquetes violentos, policías violentos, líderes sindicales, banqueros, europarlamentarios, parlamentarios a secas, banqueros, funcionarios adictos al café y demás lameculos que queréis salir en la foto:
defeco tanto sobre vuestra cara que hago desde hoy y hasta que me salga de las gónadas una HUELGA GENERAL DE VOSOTROS.
JM Martín